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Desarrollan su capacidad de observación, concentración y análisis. Entretenimiento para todas las edades.
Estimula la toma de decisiones y a asumir riesgos.
Jenga clásico de madera favorece la coordinación y precisión, considerando las leyes del equilibrio y la gravedad.
Fortalece sus habilidades viso perceptivas y viso espaciales.
Favorece el desarrollo cognitivo, social y del lenguaje.
Estimula la imaginación y creatividad construyendo e inventando historias. Además es excelente para introducir a los niños a la robótica.
Permite prolongar la atención y concentración en una misma actividad.
Mejora la destreza y coordinación óculo-manual.
Fortalece nociones de equilibrio, simetría, resistencia y percepción espacial.
Estos pasadores didácticos fortalecen las habilidades motoras finas a través del uso de la pinza (dedo pulgar–índice).
Estimula la memoria visual y de trabajo para poder seguir la trayectoria.
Los pasadores o porta-pasados de madera estimulan la capacidad para realizar tareas cotidianas como el atado de los zapatos, favoreciendo su independencia.